sábado, 8 de febrero de 2014

POESÍA Y FILOCALIA VII

 

POESÍA Y FILOCALIA VII

 

El camalote, solitario se deja llevar por las aguas mansamente. Juntos, en cambio, se hacen fuerte y donde ellos están las aguas encuentran calma.
 


Estanislao del Campo (1834-1880)

“FAUSTO”

 
-¿Sabe usted es linda la mar?
-¡La viera de mañanita
cuando a gatas la puntita
del sol comienza a asomar!
 
Usté ve venir a esa hora
roncando la merejada,
y ve en la espuma encrespada
los colores de la aurora.
 
A veces, con viento en la anca
Y con la vela al solsito,
Se ve cruzar un barquito
como una paloma blanca.
 
Otras, usté ve patente,
venir boyando un islote,
y es que trai a un camalote
cabrestiando la corriente.
 
(…)
 
Las olas chicas, cansadas,
a la playa agatas vienen,
y allí en lamber se entretienen
las arenitas labradas.
 
Es lindo ver en los ratos
en que la mar ha bajado,
cair volando a desplayado
gaviotas, garzas y patos.
 
 
 
Garza Blanca, centinela de ríos



Y en las toscas, es divino
mirar las olas quebrarse,
como al fin viene a estrellarse
el hombre con su destino
 

Y no sé qué da el mirar
cuando, barrosa y bramando,
sierras de agua viene alando
embravecida la mar.

 

Parece que Dios del cielo
se amostrase retobao,
al mirar tanto pecao
como se ve en este suelo.
 
Y es cosa de bendecir
cuando el Señor la serena,
sobre ancha cama de arena,
obligándola a dormir.
 
Y es muy lindo ver nadando
a flor de agua algún pescado:
van, como plata, cuñao,
las escamas relumbrando.
 

Estanislao del Campo “FAUSTO”, Selección Canto III

 


FILOCALIA

 

Del pecado a la serenidad…..


Apología de los Santos Hesicastas
(San Gregorio Palamas 1296-1359)


Nosotros no lo sabemos por un hombre, sino por Aquél que se hizo hombre: “No contamina al hombre lo que entra en la boca, sino lo que sale de la boca… lo que sale de la boca procede del corazón y eso es lo que mancha al hombre” (Mateo, 15, 11-19). Y el gran Macario dice igualmente: “El corazón preside todo el organismo. Cuando la gracia se ha apoderado de las praderas del corazón, reina sobre todos los pensamientos y sobre todos los miembros. Pues es allí donde se encuentran el espíritu y todos los pensamientos del alma”.

 
Nuestro corazón es, entonces, el asiento de la razón y su principal órgano corporal. Si queremos aplicarnos a vigilar y enderezar nuestra razón, por medio de una atenta sobriedad, qué mejor manera de vigilarla que reunir nuestro espíritu  disperso en lo exterior por las sensaciones, reconducirlo dentro nuestro hasta ese mismo corazón que es asiento de los pensamientos. Por ello Macario prosigue un poco más abajo: “Esto es lo que hace falta considerar para ver si la gracia ha grabado las leyes del Espíritu”. ¿Dónde?. En el órgano director, el trono de la gracia, allí donde se encuentran el espíritu y todos los pensamientos del alma, en resumen, en el corazón.


Tu puedes medir ahora la necesidad de aquellos que han resuelto vigilarse en la quietud, reunir, recluir su espíritu en su cuerpo y sobre todo en ese cuerpo que está en el seno del cuerpo y que nosotros llamamos corazón…

San Gregorio Palamas


 

"Parece que Dios del cielo / se amostrase retobao, /
al mirar tanto pecao /  como se ve en este suelo.
 


PROTO MONASTERIO PAVEL FLORENSKI
Provincia de Entre Ríos - ARGENTINA
IGLESIA ORTODOXA BIELORRUSA ESLAVA EN EL EXTRANJERO
Patriarcado Católico Ecuménico - American Orthodox Catholic Church


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