lunes, 23 de junio de 2014

Poesía y Filocalía IX - Capilla Blanca




POESIA Y FILOCALÍA IX


Este escrito esta dedicado a Mons. FRANCISCO, Franc Primozic, un conocedor de los campos de la Provincia de Buenos Aires, por los cuales ha transitado a lo largo de su vida. Esta experiencia del viaje al corazón de la provincia, es un encuentro con aquellos que nos han precedido, y en el silencio que envuelve estos lugares, se encuentra en la oración a Cristo, nuestra paz, nuestra realización espiritual.



 En la estancia La Micaela se construyó una iglesia, por orden de doña Micaela Urbistondo de Aristizábal - Hoy abandonada



CAPILLA BLANCA
(1921)

"Debajo de unos pinos
y sobre una barranca,
halagada de frondas,
adormecida de aguas,

hay una capillita
pequeña y solitaria,
con una puerta estrecha,
su cruz y su campana.

A su sombra tirado
sobre la verde grama
vengo a soñar a veces
la tarde y la mañana.

Y mientras brilla el sol
en sus paredes blancas
y en la penumbra duermen
sus santos y sus santas,

mis ojos se recrean
en ver ranchos y casas,
ondas, pájaros, flores,
quintas, chacras, estancias.

 
 Iglesia de la Estacia La Micaela - Pueblo de Vivoratá, Provincia de Buenos Aires, Argentina


  Iglesia de la Estacia La Micaela - Pueblo de Vivoratá, fundado en 1886, Partido de Mar Chiquita, Provincia de Buenos Aires, Argentina




Y digo: es dulce el pueblo,
su vida simple y clara,
honrado todo hombre,
toda mujer sin mancha.

Quise ayer curiosear
por la abierta ventana,
asi que estuve cerca
de sus paredes cándidas.

Todo dibujo torpe,
toda fea palabra,
toda calumnia sucia,
toda mentira baja;

en castellano recio,
en otras lenguas varias,
en alas de los versos,
en prosa lapidaria;

con lápiz, con carbón,
con piedra, con navaja,
bien hondo, a la ligera,
con placer y con rabia,

allí tenían asiento...
En mi capilla blanca!

Baldomero Fernández Moreno
Obra Poética (Antología)- Ed. Huemul S.A. Buenos Aires 1969. Pág. 123



 Interior de la Iglesia en la Estancia La Micaela



Interior de la Iglesia en la Estancia La Micaela





FILOCALIA



Esperando las lágrimas

 “A la salida del sol, después de haber solicitado la ayuda del Señor Jesucristo, soberanamente bueno y poderoso, siéntate en tu escabel, en una celda tranquila y oscura, reúne tu espíritu apartándolo de su habitual distracción y de su vagabundeo; impúlsalo entonces lentamente hacia tu corazón al mismo tiempo que tu soplo y lígate a la oración: “Señor Jesucristo, Hijo de Dios, tened piedad de mi!”. Me explico: paralelamente al soplo, introduce,  por así decirlo, las palabras de la oración según el consejo de Hesiquio: “A tu respiración une la sobriedad, el nombre de Jesús y la meditación sobre la muerte. Pues ambos son preciosos: oración y pensamiento en el Juicio..”.

  
Campo Santo olvidado por los campos de la Provincia de Buenos Aires

  
 Una via abandonada en el pueblo de Daireaux, Prov. de Buenos Aires

Si las lágrimas no llegan, permanece sentado, atento a estos pensamiento, así como a la oración, durante aproximadamente una hora. Luego levántate, salmodia atentamente el pequeño apodeipnon (completas); siéntate nuevamente, aplícate a la oración con todas tus fuerzas, puramente y sin distracción, es decir sin preocupación, pensamiento ni imaginación, con total vigilancia durante media hora, en obediencia al que dijo: “Fuera de la respiración y del alimento, deja fuera todas las coas durante la oración si quiere ser uno con tu espíritu”. Santíguate entonces, siéntete sobre tu lecho, piensa en los últimos fines … pide perdón por fervor … escucha, sin dejar la oración, dócil al consejo: “Que el recuerdo de Jesús comparta tu sueño” (San Juan Climaco).-

A tu despertar, da gracias a Dios y, sentado, llámale en tu ayuda y vuelve a la obra esencial, a la oración pura y sin distracción, la oración del corazón durante una hora. Es el momento en que el espíritu está, a menudo, tranquilo y calmo. Nos ha sido prescrito inmolar a Dios primicias, es decir, elevar directamente nuestro primer pensamiento hacia Jesucristo mediante la oración del corazón … Luego tu dirás el mésonyktichon (maitines) con toda la aplicación y atención posibles. Enseguida te sentarás de nuevo y orarás con tu corazón con toda pureza y sin distracción, como te he mostrado, durante una hora. Más aún si el Dispensador de todo bien te lo acuerda. 

Sabe, hermano mío, que todos los métodos, reglas y ejercicios no tienen otro origen ni razón que nuestra impotencia para orar en nuestro corazón con pureza y sin distracción (….)

Calisto e Ignacio Xantopoulos
(Fin del siglo XIV)



 Mons. FRANCISCO, Franc Primozic, viajando por las rutas de la Provincia de Buenos Aires en su vieja camioneta

Vladyka FRANCISCO, Franc Primozic, Archieparca de San Vicente, Hermano Mayor de la Hermandad de los Nazareos



 PROTO MONASTERIO RURAL PAVEL FLORENSKI
Provincia de Entre Ríos - Archieparquia de la República Argentina

IGLESIA ORTODOXA BIELORRUSA ESLAVA EN EL EXTRANJERO
American Orthodox Catholic Church


jueves, 12 de junio de 2014

Poesía y Filocalía VIII - Buscar la Morada




POESÍA Y FILOCALIA VIII


 "No sólo debemos pedir y recibir, sino custoriar lo que nos ha sido dado, pues hay algunos que han recibido pero luego han perdido" (Marcos el Asceta)

Foto: Atardecer - Costanera de la ciudad de Concordia (Entre Rios-Argentina)




FILOCALIA


BUSCAR LA MORADA

 
Toda palabra de Cristo manifiesta la misericordia, la justicia y la sabiduría de Dios, e instituye la potencia, mediante el oído, en aquellos que escuchan de buen grado. Por tanto los que -siendo injustos y sin misericordia - escucharon con fastidio, no pudieron comprender la sabiduría de Dios, crucificando al que la enseñaba. Nosotros nos escrutarnos a nosotros mismos para ver si lo escuchamos de buena gana. Él ha dicho: El que ama observará mis mandamientos y será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me manifestaré. ¿Ves cómo Él ha escondido la manifestación de sí mismo en los mandamientos? De todos los mandamientos, el más comprensivo es el amor hacia Dios y al prójimo, y consiste en la abstención de las cosas materiales y en la observación de la hesichía de los pensamientos.

Sabiendo esto, el Señor nos manda: No os preocupéis por el mañana (Mt 6:34). Justamente, el que no se haya liberado de las cosas materiales y de la preocupación que la pérdida de las mismas conlleva, ¿cómo se liberará de los malos pensamientos? Y el que se encuentre cercado por los pensamientos, ¿cómo verá al pecado realmente existente que se encuentra en ellos? Esto es tiniebla y niebla para el alma y tiene principio en las reflexiones y las malas acciones. El Diablo tienta mediante un estímulo al cual el hombre todavía puede resistir, dando así inicio a todo el proceso; el hombre, por amor al placer y por vanagloria, entra de buena gana en tratativas. Su discernimiento le haría rechazar el estímulo, pero en la práctica le toma gusto y acepta.

Pero el que no haya, por lo menos, visto este proceso general del pecado, rezando a este propósito, ¿será purificado? ¿Y si no fuera purificado, como accederá al lugar de la pureza natural? Y si no accede, ¿cómo verá la morada más interior de Cristo? ¡Ya que somos morada de Dios, según la palabra profético, evangélica y apostólica!

Deberemos pues, conformándonos con lo que nos fuera dicho, buscar la morada y golpear a la puerta, con perseverancia, mediante la oración. De tal modo que, ya sea aquí o en el final de nuestras vidas, el Amo nos abra y no suceda que si hemos sido negligentes Él nos diga: No sé dónde estáis. No sólo debemos pedir y recibir, sino custodiar lo que nos ha sido dado, pues hay algunos que han recibido pero luego han perdido. Por tanto, un simple conocimiento, o aun una experiencia accidental de las realidades que se han dicho, pueden tenerlos también aquellos que han empezado tarde a aprender, y los jóvenes. Pero en cuanto a la práctica constante y paciente, eso es sólo de aquellos que son píos y experimentados entre los ancianos, a los cuales ha sucedido a menudo perderla por falta de atención, luego de buscarla mediante fatigas voluntarias y de encontrarla. También nosotros no cesarnos de hacerlo así, hasta tanto no la poseamos sin que nos pueda ser quitada.

Entre los muchos preceptos de la ley espiritual, hemos conocido estos pocos. Son preceptos que incluso el gran Salmista continuamente sugiere a quien asiduamente trata de hacer y de aprender en el Señor Jesús. A Él la gloria, el poder y la adoración, ahora y por los siglos. Amén.


Marcos, el Asceta 



POESÍA


 "buscar la morada y golpear a la puerta, con perseverancia, mediante la oración" 

 (Marcos el Asceta)
Foto: Arroyo de la provincia de Entre Rios - Argentina





Dios se desnuda en la lluvia...


Dios se desnuda en la lluvia
como una caricia
innumerable.
Cantan los pájaros entre la lluvia.
Las plantas bailan de alegría mojada.

La tierra
como una hembra
se disuelve en los dedos penetrantes
con una palidez de mil ojos desmayados.

Camino bajo la lluvia, todo mojado, cantando,
hacia mirajes que huyen en un rumoroso sueño.

¡Lluvia, lluvia!
Desnudez del dios
primaveral,
que baja danzando, danzando,
a fecundar la amada
toda abierta de espera, quebrada ya de ardor
amarillo y largo.

Juan Laurentino Ortiz (*)


(*) Nacido en 1896 en Puerto Ruiz, departamento de Gualeguay, Provincia de Entre Ríos, Argentina. Fallecido en la ciudad de Paraná, Entre Ríos el 2 de septiembre de 1978.